SE ACABABA DE COMPROMETER, PERO EN EL RESTAURANT, TOMÓ LA CUCHARA EQUIVOCADA

Una joven reconocida como Jess Prinsloo, de 24 años, que simplemente estaba conectando con su novio, desafortunadamente perdió la vida después de utilizar una cuchara inaceptable para mezclar su té en Sudáfrica.

Jess Prinsloo perdió la vida a causa de su intensa sensibilidad a los lácteos mientras disfrutaba de una sentida escapada a Sudáfrica con su cómplice Craig McKinnon, también de 24 años.

Craig le propuso matrimonio en la perspectiva God's Window, en Mpumalanga, el 27 de diciembre. Jess aceptó y la pareja lo celebró durante unos días antes de ir a casa de su madre, en Johannesburgo, el 30 de diciembre.

Fue allí donde entró en contacto con la leche y sufrió hipersensibilidad, una respuesta desfavorable en la que se cierra la garganta, y Jess perdió la vida trágicamente al día siguiente en la clínica médica.

Tras su fallecimiento, Craig tuvo que pagar 3.700 libras en concepto de gastos hospitalarios y otras 1.200 libras por los gastos del forense.

Jess experimentó la respuesta mortal tras utilizar una cuchara inaceptable para mezclar el té. La cuchara tenía leche untada a la que Jess era hipersensible.

Craig compuso un desastroso post a través de la web de entretenimiento, "Encontrar la lucidez en el día de hoy, el más terrible de mi vida es difícil".

"En cualquier caso, hay un punto que nunca he tenido más claro, los más de 3 años que pasé con mi Jess son indispensables, y no los cambiaría por mucho tiempo con ninguna otra persona del planeta".

"Estoy destrozado y siento tormento más que nunca, sin embargo cualquiera que haya invertido energía en su organización entiende lo que quiero decir cuando digo que he sido lo suficientemente afortunado de considerarla mi compañera de vida durante los mejores tres días de mi vida."

La pareja se conoció en 2019 mientras estudiaban y se fueron a vivir juntos en 2021.

Aunque Jess tenía numerosos parientes en Sudáfrica, no había vuelto en seis años y Craig dijo que se dio cuenta de que no podría haber habido un lugar más excelente para proponerle matrimonio.

Dijo a un medio de comunicación: "La expresión de todo el mundo… significó el mundo".

Emocionada por la proposición, Jess refrescó ese mismo día sus cuentas virtuales de ocio con la noticia y se vio inmersa en mensajes de sus seres queridos.